Ante la llegada de un recién nacido se suele recibir muchos regalos, Algunos de estos regalos pueden ser realmente útiles y necesarios, pero sin embargo, otros pueden guardarse al fondo del closet.
Uno de esos regalos que siempre son bien recibidos ya que los usamos eternamente, son los clásicos “tutos”. Estas mantitas pequeñas de algodón son suaves y livianas, ideales para que las guagüitas puedan jugar, dormir o acurrucarse. Si estamos en el clínica, seguro le pasaras uno a cualquier persona que tome a tu bebe o bien se tienes alguna amiga, de seguro ser un regalo bien recibido.
Una función importante de los “tutos” es que actúan como objetos de transición emocional, es decir en el las guaguas depositan el apego y su suave textura para ellos se asemeja a “mamá”, de ahí que sea también conocido como objeto de consuelo y seguridad. Los tutos al ser de algodón son “respirables”, es decir, que su tramado deja pasar el aire, por lo mismo por más que la guagua de tape la cara con el tuto (cosa que es muy común), seguirá respirando con facilidad.
Esto nos recuerda al estudio de la “madre suave”, que habla de la necesidad innata de las crías de apegarse a un objeto suave para sentirse protegidos.
Este objeto transicional se vuelve tan importante en la vida del pequeño que le acompaña durante la mayor parte del día, lo busca cuando necesita consuelo y se vuelve imprescindible a la hora de dormir. Es algo que le brinda seguridad. Representa el apego que él bebe siente con sus padres y le ayuda a controlar la ansiedad de la separación, etapa en que comienzan a experimentar que es un ser independiente a su madre.
Fuente: Effortlesschic.cl